Cultura y Tradición a través de Imágenes

Conocer muy a fondo a uno de los genios españoles de la historia del arte será posible a partir del jueves con sólo visitar Cieza. Con fondos pertenecientes al Real Círculo Artístico de Barcelona, pasado mañana, a las 12.00 horas, abre sus puertas en Cieza la remodelada Casa Efe Serrano, que acogerá en su grandioso interior la impactante Colección Salvador Dalí.

Setecientas veintiuna piezas, entre originales, obra gráfica, tapices, cerámicas, fotografías, medallas, bocetos escultóricos y escultura monumental, que podrán visitarse durante al menos un año. «Entre las piezas más importantes de la colección destaca la escultura Divina monstruosa; el Elefante cósmico, la escultura que más fans tiene entre coleccionistas y gente no especializada en la materia; o San Sebastián, una pieza magistral en la que se aprecia como Dalí mantiene en su obra la iconografía cristiana y tradicional», comenta Juan Javier Bofill, director del museo del Real Círculo Artístico de Barcelona y un apasionado de Dalí y su obra, que destaca que las esculturas que se expondrán en Cieza fueron moldeadas por el propio genio surrealista, «no se concibieron como dibujos de los que él autorizó su creación en tres dimensiones, sino que fueron concebidas como esculturas y moldeadas con sus propias manos en cera», añade destacando su importancia.

Entre los centenares de piezas que se podrán admirar en la Casa Efe Serrano, de la que son propietarios y artífices los emprendedores Paquita Serrano y Ricardo, se eleva un óleo sobre lienzo -pintado por las dos caras- titulado Barcas en Cadaqués y Alfar dans la plaine de Lampurdan (1919-1920). Pero el recorrido no deja de sorprender al visitante, que podrá ver reunida buena parte de su obra gráfica, litografías y grabados realizados para ilustrar libros como La divina comedia, Alicia en el País de las Maravillas, Babilonia o Pantagruel, y hasta una maqueta de la falla que Dalí construyó y quemó en 1954, realizada por «el octavo fallero mayor, el señor Ovejero, con la intervención del escultor Rafael Pi Belda, que trabajó en la época, codo con codo, construyendo la polémica falla de Salvador Dalí», cuenta Bofill.