Juan Luis López Precioso publica 'Breviario de Las Flotas', un canto a la naturaleza escrito durante una época de recuperación.

Es un libro breve, que sólo consta de dieciocho poemas, también breves. Titulado Breviario de Las Flotas, contiene la experiencia que Juan Luis López Precioso, autor murciano de numerosas obras líricas, dedicó al verso durante unos meses en los que permaneció internado en un centro de recuperación. Asume la situación como un maleficio que le aflige y del que quiere huir, aunque acepta las dificultades que encuentra. Aprovechó sus momentos de lucidez para escribir estos poemas, en los aparece el grito y la soledad, pero, sobre todo, la visión de la naturaleza.

-Será difícil hacer poesía estando sometido a controles y recuperaciones...

-Es que en las épocas en las que he estado sometido al alcohol no escribía. Sin embargo, Breviario de Las Flotas es un libro, no optimista del todo, porque nunca hay que catalogar de optimista o pesimista a la poesía, pero trata sobre todo de la naturaleza.

-Algunos poemas, al menos por sus títulos, parecen casi trágicos.

-La verdad es que yo escribo siempre con unas constantes propias. En Luminaria, una obra en la que aparece como un estallido de luz, y que fue Libro Murciano del Año, en 1998, es muy vital, pero también contiene mucha carga de soledad y tristeza, a pesar de que el amor y la luz están muy presentes. En Breviario de Las Flotas sucede algo parecido. Mi constante desde que empecé a escribir es esa. En el fondo, como decía Antonio Lucas, la poesía nunca puede ser optimista del todo. Siempre hay un poso de lo que Ernesto Sábato llamaba soledad metafísica. Es decir: nacemos solos y morimos solos. Esa es la constante de la vida, aunque el tiempo que vivamos pueda ser una soledad acompañada.

-Me parece bien que la poesía no tenga por qué ser optimista, pero tampoco tiene por qué ser pesimista.

-Es que debemos tener en cuenta que, a lo largo de la historia, la poesía siempre ha tenido varias temáticas: el amor, el desamor, la soledad... Hay mucha gente que escribe desde el desamor o desde el amor... La poesía es un cúmulo de sensaciones, de sentimientos, independientes de la corriente a la que se pertenezca. Eloy Sánchez Rosillo es un gran poeta elegíaco, poeta triste; sin embargo, su último libro es más vital. Tal vez, la madurez te va haciendo más vitalista. También es el caso de Luis Adolfo Wesfalen, poeta peruano, muy poco conocido. Escribió a los veinte años con una fuerza tremenda, y dejó de escribir durante cuarenta o cincuenta años. Al cabo de ese tiempo, volvió como si estuviera en los veinte años. Yo creo que en el fondo, Breviario de Las Flotas lleva algo de vitalidad, de reconocimiento de la belleza de lo natural, del campo. Está escrito mirando hacia Sierra Espuña, viendo los rebaños de ovejas, los pinos...

-Creo que ahora se encuentra en situación similar a cuando escribió el Breviario. ¿Sigue con esas ganas de escribir?

-Escribo algún apunte. Es que, para componer poemas es preciso reflexionar sobre uno mismo, mirar hacia dentro y hacer que la poesía sea eso: espejo del alma. No estando sometido a ningún tipo de adicción negativa, la fuerza interior crece y cada uno la expulsa por donde puede; en mi caso, por la poesía. Lo he hecho con una intensidad tremenda y he necesitado descansar, porque me agotaba poéticamente. Necesito descansar de la poesía, olvidarme de ella durante algún tiempo; incluso, he leído menos a mis poetas predilectos.

-Parece triste que un poeta diga que se le ha agotado la inspiración.

-Hay fases. Estando en momento dificultosos, empecé mi último libro, que se va a llamar Ultimidades, en el sentido de la ultimidad del ser y de las cosas. Lo voy escribiendo muy despacio y lo mismo se queda en ocho o diez poemas que en doscientos. En fin, quiero hablar de Breviario, y decir que refleja las dos facetas que vivo; por una parte me estoy escapando continuamente del delirio del alcohol y por otra, recaigo. Creo que se trata de otro reencuentro conmigo mismo. Por eso, recojo unas citas de los cantautores Pablo Guerrero y Joaquín Sabina sobre delirios de alcohol, recuerdos y olvidos.

This entry was posted on 5/07/2008 and is filed under , , . You can follow any responses to this entry through the RSS 2.0 feed. You can leave a response, or trackback from your own site.