José Antonio Gómez vive de lleno las tradiciones huertanas, no en vano ha sido durante muchos años presidente de la peña El Hocete, cargo que ahora ocupa su nuera, Carmen López; además uno de sus hijos es vocal de folclore y otro ha tomado el relevo del maestro en el toque de los instrumentos. Para colmo es cocinero de autor, pero a la olla huertana, y por la peculiaridad de la unión geográfica de la pedanía murciana de Zeneta con la benielense de El Raiguero-La Villa, también ha sido pedáneo de esta última localidad; y su peña cumple ahora los 25 años de historia.
- Mire, antes de entrar en materia, no puedo resistirlo, porque a usted todo el mundo le conoce por El conejo ¿Le ha influido la pasada campaña navideña que hizo el Gobierno sobre su especie?
- (Ríe a carcajadas) Aclaremos primero las cosas, yo no soy de la especie de los conejos, es mi apodo, me viene de familia, ¿y a mucha honra! He tenido un éxito que no me lo podía imaginar, aunque realmente no ha influido en mi personalidad. Todos los vecinos decían: ¿Has visto a Pepe el conejo?, claro.
- ¿Porqué eligieron para su peña el nombre de El hocete?
- Simplemente porque es una herramienta de la huerta que se utiliza mucho en esta zona, sobre todo en los bancales de las pedanías murcianas limítrofes y en el mismo Beniel. Nosotros normalmente lo aprovechamos todo y cuando se nos quebraba una corvilla, automáticamente íbamos a que nos la afilaran por ambos lados, es decir, por la parte interior, los dientes clásicos del trozo de corvilla que quedaba se convertían en una cuchilla, además, a la parte exterior le sacamos también filo como una navaja curva y, por tanto, corta tanto dirigiéndola hacia ti, como empujándole hacia fuera.
- ¿Y para qué se utiliza?
- Normalmente para escardar las bajocas, limpiar el trigo, rascar los ajos, vamos, para trabajos muy delicados y que requieran movimientos muy precisos y a su vez sean eficaces quitando las malas hierbas.
- ¿Cuántos socios sois?
- Ahora mismo hemos llegado a los 260 asociados. Creo que está bien para ser una pedanía no muy grande, aunque aquí estamos dos juntas: Zeneta, que es de Murcia y es de donde depende, digamos que administrativamente, la peña y, a su vez, El Raiguero-La Villa.
- ¿Entonces habrá conflictos? ¿O qué se yo, bailes populares de Beniel y bailes autóctonos de Zeneta?
- No, no, no mezclemos las cosas, el conejo está bueno con arroz o frito con patatas al ajo cabañil, pero cada cosa en su sitio. Primero: existe una buena relación de hermandad entre los vecinos de ambas pedanías, y ahora disponemos, no de uno sino de dos locales, uno en Zeneta -de Murcia- y otro en la pedanía de El Raiguero-La Villa, vamos en Beniel; así que si alguien quiere buscar discusiones filosóficas si pertenezco a un sitio o a otro, pues que se vaya al local que le apetezca.
- Entonces, ¿qué actividades realizáis?
- Ante todo participar en todas las actividades festivas y culturales que se promueven, tanto en Zeneta como en Beniel. Donde nos llaman, allí estamos nosotros: Festival Nacional Folclórico en Zeneta, Festival Regional de Villancicos en Beniel, en los bandos de la huerta de ambas poblaciones y también hemos recuperado bailes como la jota y la malagueña de Zeneta y el fandango de Tabala, entre otros.
- Mire, la cosa puede complicarse algo más, porque vuestros socios benielenses de El Raiguero-La Villa limitan con la Comunidad Valenciana ¿hay alguna influencia de esta región en vuestros bailes?
- No me complique usted las cosas. Nosotros somos huertanos de Murcia.
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